Con la incorporación de 16 clones de castaño de alta calidad al Catálogo Nacional de Materiales Forestales de Reproducción, Galicia da un paso importante de cara a la homologación del más adecuado material genético forestal que servirá de base para repoblar el país, especialmente en las zonas atlánticas y el Cantábrico, donde deben ser resistentes al ataque de la tinta, porque en el interior galaico todavía se conserva una gran diversidad de castaños y otras especies forestales que también han sido inventariadas para su uso y conservación. Detrás de todo ello hay un trabajo científico de décadas desarrollado en el Centro de Investigacións Ambientais de Lourizán, continuando experiencias que comenzaron en los años treinta del siglo pasado.
Tras la publicación el pasado día 25 por parte del Ministerio de Agricultura de la mencionada ampliación del catálogo forestal, que incluye además otros 16 tipos de clones cualificados también en Lourizán, propietarios y viveristas podrán disponer de los árboles autóctonos mejor adaptados a la producción de madera, un material de base que se reveló de imperiosa necesidad, por ejemplo, el pasado año, tras la destrucción de los montes de Pontevedra y A Coruña por los incendios.
La ampliación del catálogo no solo afecta al castaño ?de reproducción lenta pero deficitaria para atender el mercado, sobre todo a raíz del impulso dado a la repoblación con frondosas autóctonas?, sino también a otras especies forestales de interés como el cerezo bravío (el guindo) que crece en los montes, y del que la Xunta dispone ahora también en huertos semilleros situados en Boqueixón y Laracha (A Coruña) y en Areas (Tui). Antes había identificado una masa adulta de diez hectáreas entre Quiroga y Monforte.
En otras especies importantísimas para la repoblación, como es el pino del país, las mejores plantaciones se encuentran en O Ribeiro, con más de 31.000 hectáreas en Cea, aunque entre los rodales considerados autóctonos sobresalen también otras 20.000 hectáreas de Ulla, en Santiso (A Coruña), y unas 10.000 en A Peroxa (Ourense). En esta especie había ya bastantes semilleros con material seleccionado a lo largo de Galicia, pero el homologado oficialmente ya como superior (cualificado) está en 3,4 hectáreas en el Cordal da Loba (Monfero) y otras tantas en fincas de Bóveda. Para el Pseudotsuga menziesii (pino de Oregón), 2,6 hectáreas de cultivos en Lourizán (Pontevedra) y San Breixo (Guitiriz).
Los viveros forestales podrán ahora verificar la identidad de algunos de los árboles que venden y esperan que se habilite un mecanismo de transferencia de dicho material forestal de base desde Lourizán, para su venta.
La presidenta de los viveristas, Inmaculada López, pide que se acelere ese proceso de verificación para disponer cuanto antes de árboles de calidad. La Xunta, por su parte, ya ha elaborado un decreto para regular el sistema de producción, además del control silvícola y la comercialización, que desde hace años está regulada por ley.
La responsable del programa en Lourizán, Josefa Fernández, dice que ahora se hace oficial un material forestal existente en los viveros y que excluye cultivos que se comprobó que no aportaban buenos resultados. Entre las recomendaciones de uso destaca que las zonas de plantación más adecuadas de los clones híbridos son áreas costeras, por debajo de los 600 metros, con sequía estival inferior a un mes, con pocas heladas y suelos bien drenados. Son los resistentes al mal de la tinta, y allí el castaño debe tener una orientación preferentemente maderera.
Fonte: La Voz de Galicia