22.11.2009

25 medidas para garantizar el futuro de la castaña

Publicado en: Proxectos

La castaña calmó el hambre de hombres y ganado y ha formado, desde tiempos inmemoriales parte del paisaje de El Bierzo. Actualmente, la despoblación de la comarca leonesa, los malos cuidados y los bajos rendimientos económicos que produce, ha provocado que la castañicultura no se contemple como una forma de vida. Sin embargo, está comprobado que la especie puede generar rendimientos económicos importantes si la estructura productiva es la adecuada y si se consigue recuperar el estado buen estado fitosanitario de los grandes sotos bercianos.

El Centro de Servicios y Promoción Forestal y de su Industria de Castilla y León (Cesefor) trabaja junto a entidades, ayuntamientos, asociaciones de la zona, centros de investigación y la Universidad para conseguir la perdurabilidad del castaño como elemento natural, social y paisajístico en León. Para lograr el rendimiento económico de la especie e incentivar, a su vez, la supervivencia, la Dirección General de Medio Natural prevé aprobar el ‘Plan Estratégico de la Castaña’, que contempla la aplicación de 25 medidas.

León es la provincia de la Comunidad autónoma donde la castañicultura adquiere mayor relieve, tanto por superficie ocupada como por producción. Cesefor calcula que actualmente los sotos de castaños ocupan 12.500 hectáreas productivas sólo en El Bierzo, y que el 53 por ciento de la superficie total de castaños de Castilla y León se ubica en León.

La Comunidad Autónoma aporta el 25 por ciento de la producción nacional de castañas. En concreto, España produce alrededor de 40.000 toneladas de castañas al año, de la cuales 10.000 proceden de Castilla y León. Por provincias, El Bierzo aporta el 20 por ciento de la producción nacional, es decir, 8.000 toneladas al año; las comarcas zamoranas de Aliste y Sanabria, 10.000 toneladas; las zonas salmantinas de Béjar y Sierra de Francia, 500 toneladas y el sur de Gredos, en Ávila, otras 500 toneladas.

Sólo las 8.000 toneladas que se producen en el Bierzo, si se vendiesen como castaña bruta, generarían unos ingresos aproximados de ocho millones de euros. No obstante, si la castaña se vendiese como producto transformado (harina, marrón glace) muy valorados en países como Japón, Italia y Francia, los beneficios se multiplicarían por 30.

José Arozamena, técnico de Cesefor, señala que actualmente empresas extranjeras compran producto bruto en España a un precio muy bajo para luego transformarlo en sus factorías y comercializarlo a precios astronómicos. A este respecto, el fin último del plan estratégico para revitalizar el sector busca que El Bierzo transforme su producto para que el valor añadido de la castaña se quede en la comarca leonesa.

Dificultades

No son pocas las dificultades que el sector deberá superar para conseguir que la castañicultura vuelva a ser una forma de vida. El Bierzo, al igual que el medio rural castellano y leones, ha sufrido la despoblación de forma fulminante, lo que ha provocado la falta de cuidados de los sotos. Otro de los problemas del sector es el minifundismo extremo. En este sentido, Arozamena indica que la propiedad está “atomizada” con propiedades en muchos casos que rondan los diez metros cuadrados y en las que existen dos dueños, uno el del suelo y otro el del propio árbol. A estos dos problemas se suma el estado fitosanitario de la especie que actualmente está amenazada por dos plagas denominadas chancro y tinta.

Para afrontar estos problemas, el plan estratégico pretende conseguir que los sotos estén sanos y recuperados, que la sociedad de El Bierzo participe en el proyecto y que la estructura productiva sea la adecuada. Para lograr que los sotos se mantengan sanos se intentan evitar los incendios a través de la repoblación y la prevención. A su vez, también está trabajando en mermar el número de castaños afectados por el chancro. En este sentido, Arozamena detalla que existen áreas de la comarca de El Bierzo en la que la totalidad de los pies de castaño están afectados por la plaga, y esto supone, a medio plazo, la eliminación del pie. “Se están haciendo estudios pero se habla de niveles de afección del 75 por ciento”.

Para atacar la plaga, el Centro de Sanidad Forestal de Calabazanos (Palencia) trabaja en dos frentes, con cepa hipovirulenta y con los agricultores, mostrándoles los cuidados que deben practicar. “El chancro se propaga por malas actividades con el castaño, como podas inadecuadas o con plantaciones con planta ya infectada. Y es importante que el castañicultor conozca que sus actuaciones pueden incrementar los niveles de plaga o detener el chancro. Es importante formar y sensibilizar a los agricultores”. Para conseguir una estructura productiva adecuada, según el técnico, es necesaria una profesionalización del sector, ya que los castañicultores trabajan como hace medio siglo.

Mesa de la Castaña

Uno de los primeros pasos que se ha dado para conseguir que el sector sea rentable y dinamizar todas las actuaciones ha sido la conformación de la Mesa de la Castaña, una herramienta que hace ya de por sí al sector más fuerte, ya que trata de crear un foro en el que participan todos los agentes implicados de forma coordinada. Asimismo, también es importante la valorización del producto a través de la Marca de Garantía de la Castaña del Bierzo, promovida por la Asociación berciana de agricultores.

Los trabajos de campo para lograr que la castañicultura sea rentable han comenzado en la zona del Monumento Nacional de las Médulas. Además, el Ayuntamiento de Borrenes ha dispuesto una oficina técnica desde donde coordinar las actuaciones.

De la importancia que puede adquirir el sector da muestra la cantidad de agentes que están implicados en el proyecto. Así, la Fundación Adesper realiza estudios de conocimiento el entorno, fitosanitarios, de formación y de campo. El Campus de Ponferrada de la Universidad de León y la Ciudad de la Energía (CIUDEN) realizan estudios de investigación y aportan el conocimiento de la problemática del castaño y la Asociación A Morteira se encarga de sensibilizar a la sociedad.

Éstos son algunos de los agentes implicados, sin embargo, el verdadero protagonista es la población local que tiene la oportunidad de recuperar una forma de vida en torno al castaño, una especie arbórea que además crea ricos ecosistemas y también genera ingresos por sus aprovechamientos madereros.

 

Fonte: Laopiniondezamora.es